Capítulo Especial =D
Changmin negó con la cabeza varias veces,
mientras veía a Jaejoong conversar animadamente con quien sabe quién, suspiró
con el teléfono celular aun en su oído y habló.
―Mami…dime que debo cuidar a Ju Yin
―Debes
cuidar de Ju Yin…
―Gracias…nos vemos en un rato…―suspiró
suavemente y se acercó al sujeto en cuestión que en estos momentos lo hacía
sentir una serie de complicaciones intestinales referentes a una palabra que
odiaba admitir que sí se hallaba en su diario vivir: celos―Hyung
― ¡Ah Minnie! Ven quiero presentarte a…
―Ahora no puedo hyung, tengo que ir a
cuidar a Ju Yin, mi mamá acaba de decírmelo
―Ya veo…entonces. ¿Nos vemos en la noche?
―Como quieras…―y sin decir más salió del
lugar tan concurrido, no miró atrás ni por un instante porque sabía que si lo
hacía el mayor iba a darse cuenta que en este momento hervía en la pura rabia
que le cargaba.
¿Presentarle? ¿Presentarle? Ah claro, el
muy descarado pretendía presentarle a su novio a su disque amiga, se la
restregaría en la cara y diría, es una amiga de…y de…por favor, cada ser disque
pensante amigo de Jaejoong sin contar a Yoochun, Junsu, Yunho, Heechul, Siwon,
LeeTeuk y unos dos o tres más andaban tras sus huesos. No era estúpido, por
amor al cielo, el que si era estúpido y con doctorado incluido era Jaejoong por
no darse cuenta.
Eso ya era otra historia, lo bueno era
que no tuvo que aguantar otra estúpida conversión a su contraparte por culpa de
Jaejoong, eso sería pasar la línea de la poca cordura y paciencia que le
quedaba porque así como su relación iba esto iba terminar convirtiéndolo en un
ser amorfo mitad chica mitad chico.
Y no quería saber si eso iba a ser en
sentido vertical u horizontal.
Cuando llegó a casa Seo Yin estaba
sentada en la alfombra con su hermana en sentada en su regazo, dejó su chaqueta
en el perchero en la entrada y se sentó junto a ellas, casi automáticamente Ju
Yin pasó a su regazo apoyando su cabeza en su pecho.
― ¿No tenías una cita?
―Tú lo has dicho, tenía
―Y ahora que pasó…
―Nada…o están viendo ese programa de
variedades, ¿Ya pasaron la presentación de la Wonder Girls?
―Cómo si te interesara
―No me interesa, sólo quiero que te
calles
―Eres malvado…
―Claro que lo soy cuando estoy molesto
así que no me molestes porque será peor para ti
― ¿Y Jaejoong? ―preguntó Ju Yin, Changmin
suspiró
―Probablemente en ese restaurante al que
me invitó
― ¿Lo plantaste? ―preguntó un poco
alterada Seo Yin levantándose de golpe tapándoles la televisión
―No, lo vi y le dije que tenía cuidar a
Ju Yin
―Eso es mentira… ¿Por qué no eres
Changmi?
―Por qué le dije a mamá que me dijera eso
―No te preguntaré porque lo hiciste…
―Así
está mejor…―Seo Yin volvió a sentarse y vieron la presentación de un
nuevo grupo, pasada ya casi una hora y media viendo programas de variedades y
hasta de cocina, en su aburrimiento Changmin y Ju Yin se durmieron en la
alfombra
―Y luego dicen que Changmin es el mayor…―bufó
tapándolos con una cobija para que no se enfriaran, al poco rato mientras ella
intentaba hacer un poco de fideos instantáneos si quiera el timbre sonó, antes
de ir a atender se fijó a los durmientes, rezando porque no los despertara.
Al abrir se encontró con Jaejoong con una
gran caja en las manos, suponiendo que era un pastel.
―Hola…Changmin está durmiendo en la sala
con Ju Yin así que no lo molestes si quieres vivir
―Puedo sobrevivir, no te preocupes, pero
no voy a necesitar despertarlo―Sonrió de manera extraña, un escalofrío recorrió
la espalda de Seo Yin y decidió no preguntar más porque sabía que la respuesta
no le gustaría mucho que digamos, tomó la caja de las manos del mayor y la
llevó a la cocina, cuando salió vio como ponía a Ju Yin en el sillón y luego
cargaba a Changmin como si fuese una pluma ahora dudaba del peso que su hermano
mostraba cuando iba a fastidiarla tirándose sobre ella para despertarla.
¿Acaso se ponía piedras en la panza para
pesar más y saltar sobre ella? Eso quedará como una incógnita, después de todo
su hermano era extraño de todas las maneras posibles por donde lo vieras, no
sería nada de extrañar que con sólo pensarlo pudiera pesar hasta veinte kilos
más.
Dejó de mirarlos y volvió a la cocina a
observar la torta, era casera, lo sabía por el aroma que despedía además que
había visto parecidas a esas muchas veces desde que notó que alguien estaba
interesado más de la cuenta en su hermano, lo interesante era que un par de
palabras estaban grabadas encima de ella, lo
siento.
Con que en ese lo siento estaba la razón
del mal humor del ogro que era su hermano mayor.
…
…
…
Jaejoong dejó a Changmin en la cama,
besando su cabeza dulcemente mientras se sentaba a su lado y comenzaba a jalar
la camisa que estaba metida dentro de sus pantalones.
―Maldito depravado deja de meter tus
manos en mi ropa o te juro que te lanzo por la ventana
―Minnie, sabes que quieres jugar…
―Ve a jugar con tu amiguita o quien mejor
le entre al juego, yo quiero dormir
― ¡Minnie! ―dijo haciendo un puchero,
pero el menor seguía con los ojos cerrados― ¡Traje pastel!
―Metete tu pastel por donde te quepa…
― ¡Minnie! ¡No hagas que me enoje porque
juro que te...!
― ¿Qué me harás?
―Te violaré, y sabes que lo voy a hacer―Changmin
abrió los ojos lentamente clavando su mirada filosa en Jaejoong, al contrario
de comenzar a hacer drama como siempre también afilo su mirada sin dejarse
vencer por el menor, que parecía refunfuñar interiormente.
Luego de un rato en una costosa batalla
de miradas cuando Jaejoong terminó ganando el menor se levantó para correr a la
puerta pero terminó con la mejilla estampada en esta y Jaejoong tras él
presionándolo con su cuerpo.
―Te lo advertí
―No estoy para tus estupideces Jaejoong,
no quiero que me toques y si lo haces sabes que puedo matarte a golpes a sí que
ni se te ocurra
―Yo tampoco estoy para estupideces, sé
que te pusiste celoso pero no es para que te pongas así, ni siquiera me dejaste
que te dijera quién es
―Ni siquiera necesito que me lo digas, es
lo de siempre, “Es mi amiga de primaria, o de las clases de batería, la conocí
en Japón, nos chocamos en el metro y después. ¡Minnie salgamos juntos! Y esto
termina en una salida a un estúpido club nocturno donde terminas tomando de más
y tú ‘amiguita’ manoseándote hasta el alma, por favor Jaejoong no soy estúpido,
cada ser viviente que se cruza en tu camino está interesado en ti y me quieren
ver la cara de idiota para que me pongas los cuernos con ellos. Estoy harto,
puedes salir con quien quieras terminamos…
―No quieres terminar conmigo
―No, no quiero pero debemos hacerlo
―Minnie…ella se llama Keiko y es mi
prima, es con ella con quien viví cuando estuve en Japón―Changmin tapó su cara
con las manos y soltó un pequeño gritito―No tenemos porqué terminar, tú no
quieres yo no quiero y no hay más razones…
―Si las hay…ya te lo dije, puede que ella
sea tu prima y mi escena de celos esta vez haya sido fallida y estúpida pero
eso no quita lo que ya dije Jaejoong, dime cuantas veces sucedió
―Lo de la discoteca sólo dos veces…
―Sólo dos veces, dos veces Jaejoong, en
las que yo tuve que aguantar excusarme y salir corriendo, aguantar volver a ser
Changmi y soportarte con tu drama de borracho, no lo aguanto no te aguanto y si
vuelve a pasar te juro que explotaré no sólo de los celos sino también de la
impotencia contra mí mismo
―Tú si eres tonto―Changmin no levantó la
mirada pero Jaejoong continuó―Tú eres capaz de notar quienes están interesados
en mí pero no te das cuenta cuando yo me pongo celoso, cuando yo me enojo y
estoy a punto de reventar. Tú dices que sólo aquellos en los cuales confías y
son mis amigos de la secundaria y algunos otros son los que no se interesan en
mí pero el resto sí. ¿Has notado como te mira Yunho últimamente? ¿Has notado
como te trata DongHae? ¿Has visto la coquetería de SooYoong para contigo? ¿Te
has dado cuenta que casi todo primer año babea por ti? ¿Tú cómo crees que me
siento? Puede que me haya controlado todo este tiempo pero no lo haré más, incluso
mis celos pueden ser peores a los tuyos, lo digo porque te conozco Changmin, y
me conozco perfectamente sé cómo soy y no quería hacerte enojar pero me cansé,
porque ahora me creo capaz de romperle la cara a todos ellos
―Estás diciendo tonterías Jaejoong…
―Para nada, Yunho sólo te mira, pero eso
es porque sabe que estás conmigo y sabe que puedo matarlo si se te acerca,
DongHae prefiere mantenerse al margen porque también me conoce, SooYoong sólo
te coquetea cuando piensa que no me doy cuenta pero tampoco se arriesga a decir
nada, en cuanto a los mocosos de primer año, ellos te idolatran y casi besan el
suelo por donde caminas, no te das cuenta porque son una bola de niños que se
avergüenzan y simplemente prefieren admirarte de lejos…o ponerte corazones en el
casillero, dije que yo te los había puesto pero no fue así, yo mismo vi a ese
mocoso ponerlo―Changmin se quedó callado, mirando un poco contrariado a
Jaejoong. ¡Era popular!
―Puedo tener los novios que
quiera…incluso puedo estar con Yunho. ¡Quién lo diría!
― ¡¡Changmin!!
―Dime~
―No estoy bromeando
―Yo tampoco, lo que me estás dando a
entender es que sí vuelves a joderla puedo terminarte y tener a quien yo quiera
―Ni se te ocurra porque los mato
―Entonces…no lo arruines…―Jaejoong sonrió
como quien dice con la mirada de ‘zorro’ no malinterpretar el termino nos
referimos a la simple mirada de un animal carnívoro que sonríe macabramente con
la mirada mientras trepa sobre su víctima que parece lo suficientemente
complacida por ser devorada.
Se deslizó sobre el menor y lo besó en
los labios, dejándose envolver por la sensación de sus suaves labios
acariciando los suyos. No pasó mucho rato para que la situación adorable pasara
a un término demasiado fuerte en el cual ambos se hallaban en una pelea con sus
pantalones, no estaban lo suficientemente lúcidos para desabrocharlos
especialmente Changmin que de vez en cuando en lugar de querer abrir el
pantalón por el lugar correcto intentó hacerlo por uno de los ojales para el
cinturón.
Pasado el error máximo de Changmin en la
cama, ya estando así como Dios los trajo al mundo Jaejoong parecía perdido en
el cuerpo del menor, no se podía definir en qué parte porque sus ojos viajaban
de un lado para otro sin detenerse.
― ¡¡¡ ¿Quieres apurarte?!!!
―Sí señor, perdone señor…―dijo Jaejoong
en tono burlón inclinándose hacia el menor logrando que este soltara una
pequeña exclamación― ¿Está mejor así señor?
―Sólo muévete y cierra el pico…
Jaejoong rió y comenzó a moverse
lentamente, de adentro hacia fuera llevando su mano a su cabello acariciándolo mientras
veía las expresiones que ponía Changmin mientras aumentaba el ritmo de sus
embestidas, gimiendo quedamente intentando no elevar demasiado la vos. A
Jaejoong no parecía importarle mucho el acto que llevaba a cabo, en cambio era
capaz de correrse solamente mirando al menor que movía la cabeza de un lado
para otro, sintiendo que pronto llegaría el final y el también.
Cuando ello sucedió apenas un gemido
logró escucharse justo cuando Jaejoong selló sus labios con los de Changmin
ahogando el grito de placer que salía de lo hondo de su ser.
Cuando sus respiraciones sus normalizaron
luego de acabar, continuaron besándose, suavemente, como si el tiempo se
hubiera detenido en ello, ambos sonriendo entre besos, contentos.
…
…
…
― ¡¿Dónde está mi torta?! ―Exclamó
Changmin bajando a la sala con una sonrisa, Seo Yin señaló a la cocina sin
querer saber porque estaba repentinamente tan feliz aunque lo chistoso era la
manera en la que caminaba, luego de un rato bajó Jaejoong abrochando un botón
de su camisa.
―Si van a hacer cochinadas ahí arriba al
menos háganlo con decencia y bajen bien arreglados. ¿Se imaginarían qué sucede
si mi mamá los ve? O aun peor mi papá―Jaejoong acarició su cabeza
―No hicimos absolutamente nada pequeña
mente sucia―dijo Changmin desde la cocina, Seo Yin levantó una ceja mirando a
Jaejoong, este sonrió
―No hicimos nada malo, no mal interpretes
la alegría de Minnie
―Veamos… ¡Hermanito! ―Exclamó Seo Yin con
un semblante triunfante, al rato un grito agudo salió de la cocina
―Está bien, está bien, lo admito, si
hicimos algo pero es algo que no debes saber, estás muy chiquita para
entenderlo
―Cuál chiquita ni que nada, yo sé que
ustedes estuvieron haciendo cosas no aptas para todo público, no soy tonta, además
yo sé que cada vez que a Changmin le da por imitar a los pingüinos es porque
Jaejoong estuvo ‘jugando’ ahí atrás
― ¡¡Seo Yin!! Si lo dices así suena
realmente sucio―dijo Changmin apareciendo con un trozo de torta en manos,
haciendo un puchero, su hermana puso una cara inocente de no creerse
―Pensé que era una expresión más
apropiada pero dada que suena mal diré que tuvieron s….
―Ya, ya entendimos no es necesario que lo
digas. ¿No ves que hay una criatura durmiendo ahí y podría escuchar las
cochinadas que pasan por tu cabeza?
―Ninguna cochinada…
―Como si no hubiera visto esos manga Yaoi
que tienes en tu cuarto, eran demasiado explícitos hablando de ello
― ¡¿Con qué derecho entras a mi cuarto?!
―Fue sin querer cuando por culpa de este
genio-nótese el sarcasmo-diagonal mi novio, diagonal Jaejoong me convirtió en
Changmi metiéndome en dificultades y tuve que encerrarme en tu cuarto para que
no me encontrara, lo vi sin querer, creí que era el de Tsubasa Chronicles que
te regalé en tu cumpleaños pero me equivoque drásticamente…no dije nada porque
tenía demasiadas cosas en mi cabeza y para que veas que soy buen hermano no le
dije nada a mamá
―Si le dices algo te mato
―No puedo mentir así que no prometo nada―Seo
Yin protestó un rato y luego suspiró y le robó un poco de torta a Changmin, que
no dijo nada, luego de un silencio bastante prolongado dijo
―No puedo creer que mi cruel hermanito
sea tan uke y para colmo tan ruidoso, si oyera como grita cuando…
―Mierda…
…
…
…
― ¡¡¡Ya tengo mi manga!!! ―exclamó Seo
Yin correteando por el pasillo del centro comercial con Changmin y Jaejoong
detrás con caras de muerto
―No puedo creer que seas tan manipuladora
Seo Yin…
―Lo aprendí de ti, además mejor para
ustedes, si yo no menciono nada mamá y papá jamás preguntarán, si no preguntan
no te verás en la necesidad de decir la verdad y esconderte bajo la mantita de
borreguito por el resto de tu vida
―Cállate y vete a leer tu manga
pervertido―La chica se fue corriendo, Changmin suspiró y se apoyó en Jaejoong
―No fue buena idea hacerlo en tu casa
―Imbécil, ¿Quieres que el mundo se
entere?
―No, pero es que fue irresistible, además
te gustó y no puedes negármelo
―Si me gustó pero te juro que la
siguiente me vengaré y de esa no te salvas
―Seguiré yendo al gimnasio no te
preocupes―Changmin cruzó los brazos, Jaejoong vio a Yunho con su conquista
temporal y sonrió cuando notó que los había visto pero se hiso al desentendido
fingiendo que no había visto a nadie se acercó a Changmin y lo besó, el menor
no se reusó pero se negó a mayor contacto, cuando Yunho llegó hasta ellos ya
tenía hasta la cara descompuesta. No era que Jaejoong fuera malo, pero por si
las moscas-en este caso los Yunho-debía marcar territorio.
―Hola como están
―Bien, vinimos a comprar algunas cosas
con la hermanita de Minnie. ¿Y tú que haces aquí Yunnie?
―Vine a comer a la plaza con SoYeon, ella
es SoYeon, mi prima―La chica los saludo dulcemente y luego se fue a ver uno de
los aparadores, Yunho sonrió―Debo irme, mi padre nos espera para ir a casa y ya
se nos hiso tarde, nos vemos el lunes
―Adiós Yunho…―dijo Changmin, Jaejoong lo
tomó de la mano y comenzó a jalarlo a la salida donde Seo Yin los esperaba
leyendo su dichoso manga, con las mejillas sonrojadas.
―Pervertida
― ¡¡No es nada malo!! Más bien este es
muy suave…el problema es que estos dos se parecen mucho a ustedes, sólo que el
que se parece a Changmin es más bajito que el que se parece a Jaejoong…―Ambos
se miraron y decidieron ignorarla, después de todo suficiente mal de la cabeza
estaba la pobre, cuando llegaron a casa uno de sus compañeros de clase estaba
en la sala conversando con la mamá de Changmin animadamente, cuando Jaejoong lo
vio frunció el ceño
― ¿Quién es ese?
―Lo había olvidado, el proyecto de
química…―dijo el menor ignorando olímpicamente a Jaejoong que solo se enojó
más, el chico se llamaba DongWoon era de su clase un año mayor que Changmin y
unos meses menor que Jaejoong, pero eso no interesaba, lo feo en este momento
es como esos ojos estaba viendo la cintura de la criatura ya no tan inocente
que era su novio, decidió hacer su mejor actuación a lo Heidi siendo amable con
todo el mundo invitando la torta que hiso para Changmin, ya sabría cómo sacar a
Changmin del aprieto en el que se estaba metiendo porque con la fama de dicho
chico lo más probable sería que su novio terminase atado a una cama con una
mordaza en la boca y sin pantalones…ok era mucho exagerar pero ¿Qué esperan de
una mente tan distorsionada como la de Kim Jaejoong?
Cuando todos tuvieron torta en manos
Jaejoong hiso su siguiente actuación como el torpe del año empujando a Changmin
provocando que el platillo se volteara y terminara sobre su vientre, ya tenía
experiencia en ello así que era lo más fácil, con la disculpa de ayudar a
Changmin con el desastre se lo llevó al baño donde el menor luego de cerrar la
puerta lo vio con el ceño fruncido.
―Degenerado, psicópata, pervertido,
pederasta…yo sabía que algo tramabas con tu actitud de seamos buenos con todos―Jaejoong
no dijo nada, simplemente sonrió culpable y con sus dedos quitó la masa que
estaba en el estómago del menor, cuando terminó de quitar eso quitó la crema
luego levantó su camiseta
―Quítatela, está sucia, no quieres estar
sucio
―Claro que no quiero pero primero te
sales de aquí y me traes otra camiseta
―Así no es divertido Minnie, coopera al
menos
―No quiero diversión sólo quiero arreglar
el asunto con DongWoon y ya
― ¡O! te manché―dijo de repente, cuando
Changmin se fijó Jaejoong había puesto sus dedos llenos de crema pastelera en
el su estómago, sobre su piel, dejándola marcada de blanco, frunció el ceño y
Jaejoong sonrió―Hay que limpiarlo―dijo de la manera más pervertida que pudo
salir de su boca y se agachó a lamer su estómago, lo feo llegó cuando la puerta
se abrió y tanto su madre como DongWoon vieron a Changmin con la camiseta
amontonada sobre su pecho, una marca de crema en su estómago y lo peor Jaejoong
lamiendo esa marca.
― ¡¡Puedo explicarlo!! ―exclamó empujando
a Jaejoong y tapando su estómago con una toalla, rojo como un tomate, luego
cerró los ojos―No, no puedo, lo que acaban de ver fue lo que vieron y si me
disculpan debo huir. Ah por cierto Jaejoong…te me acercas de nuevo y clavo la
varita de mi juego de ajedrez mágico en tu estómago.
Jaejoong sonrió culpable de nuevo, viendo
a la madre de Changmin que parecía más roja que su hijo y DongWoon que al
contrario parecía confundido más de la cuenta.
Fue inevitable que Jaejoong rememorara el
accidente del helado hace algún tiempo, aquel el que Changmin siempre hacía
énfasis por el hecho de que tuvo que sacarse su camiseta y mostrarle su vientre
mientras intentaba limpiar su estómago de lo meloso de aquel helado de mora,
fue su primer impulso de intentar ver algo más de piel en Changmin y por lo
tanto su primer indicio de perversión, pero seamos sinceros, Changmin tampoco
era un santo, como si no se hubiese dado cuenta que lo miraba más de la cuenta
en la clase de deportes cuando terminaba sudado en exceso con la camiseta
blanca ya transparente pegándose a su torso remarcando sus músculos.
―Será…será mejor que me vaya…―dijo a
duras penas DongWoon, sorprendido―Llamaré a Changmin después, hasta luego
señora Shim…nos vemos…Jaejoong―cuando el chico se fue Shim HeeYoon mostró que
tampoco era tan inocente.
―Sube, pero como le hagas lo que ya
sabemos verás que puedo hacer yo…―dijo en un tono bastante especial, Jaejoong
volvió a sonreír culpable y decidió subir rápidamente, gracias al cielo no tuvo
que partirse el puño tocando la puerta de Changmin porque este había olvidado
cerrarla con seguro así que accedió fácilmente lo vio limpiándose el estómago
con un pañuelo en el baño y decidió acercarse.
― ¡¡Ni lo sueñes!! ―exclamó Changmin
sacando de detrás de él la varita del ajedrez mágico de Harry Potter, señalando
amenazadoramente como si de verdad pudiera lanzarle un hechizo
―Tiene un imán…y puedo suponer que el piercing
es de su carga así que…si lo que pretendes es alejarme de ti ese imán puede al
contrario atraerme
―No seas idiota, me vale un pepino que
tenga un imán voy a meterte la varita por el estómago si no te alejas
―En verdad… ¿Me lastimarías? ―Changmin
refunfuño intentando contenerse la rabia mientras alejaba la varita y seguía limpiándose,
Jaejoong se acercó y mojó la punta de una toalla para pasarla por el lugar
manchado―Deberás bañarte va a seguir quedando pegajoso
―Fue tu culpa tarado…además no confío el
bañarme contigo aquí
―No te preocupes tu mamá ya me amenazó
así que no voy a hacer nada. ¿Está bien? ―Changmin suspiró y movió la mano en
señal de que quería que saliera del cuarto de baño, Jaejoong así lo hiso y fue
a sentarse a la cama del menor, luego de un rato escuchó la ducha sonar, el
agua chocando contra la cerámica y no pudo evitar morderse los labios
imaginando a Changmin ahí dentro, todo mojadito y…
La puerta se abrió y vio a la mamá de
Changmin mirándolo.
―Y Minnie…
―Se está duchando…―dijo tranquilamente
―Iré a hacer unas compras vuelvo en un
rato…―dijo suavemente, con una sonrisa como si estuviese segura de que no podía
hacer nada, luego cerró la puerta y se fue, Jaejoong volvió a suspirar.
Escuchó un ruido en el bañó y miró a la
puerta, esta se abrió lentamente, la cabeza de Changmin salió de ella, con las
gotas de agua chorreando por su rostro y cabello.
Changmin estiró la mano como esperando
que él la tomara. Le tomó dos segundos comprender que quería, pero sólo un
segundo tomar su mano e introducirse al baño con él.
~ ¿Fin?~